LA VARICELA

Estamos en época de granitos, unos son y otros no son. Todos los papás se preguntan la duda existencial que al principio es difícil de distinguir porque salen cuatro granitos perezosos que tiene que resolver el pediatra cuanto antes, por si los llevan o no al cole. A veces ni se nota, otras veces evolucionan con todo su séquito y otras dan una imagen espectacular de la piel por la cantidad de lesiones rojas agrupadas en tronco, cara y extremidades. Estamos hablando de la enfermedad exantemática de moda es esta época, LA VARICELA.

Esta enfermedad está producida por un virus llamado Varicela-Zoster y tiene un periodo de incubación de unos 14 días aproximadamente y una duración de una semana.
¿Cómo la distinguimos?
Puede empezar con un cuadro de fiebre, malestar general, dolor de cabeza y pérdida de apetito y después de dos o tres días aparecen en la piel pequeñas lesiones redondeadas de color rojizo, como granitos que van trasformándose poco a poco en vesículas, lesiones con agüilla dentro que se revientan pasando por ulceritas y llegando a formar costras. Este patrón se conoce con el nombre de "imagen en cielo estrellado" haciendo referencia a las distintas formas por las que pasan estas lesiones. Normalmente suelen desaparecer por completo no dejando cicatriz, pero a veces si el picor es muy intenso puede haber lesiones de rascado que pueden infectarse y al curar dejar cicatriz.


¿Es contagiosa?
La varicela es tremendamente contagiosa, el periodo de contagio aparece 1 ó 2 días antes de que aparezcan las lesiones y dura hasta que todas ellas se transforman en costras. Se contagia por medio de las gotitas de la saliva por la tos y estornudos, al hablar y también por contacto con las lesiones. A veces pican y otras veces no dan ningún tipo de problema.
Después de la infección el virus se queda en los ganglios linfáticos y cuando hay una bajada de defensas, éste se reactiva en forma de herpes Zóster o vulgarmente llamado "culebrilla", dando otro tipo de lesión en forma de vesiculitas agrupadas que pican mucho y siguen el recorrido del nervio que está en esa zona, pero esto es más frecuente en niños mayores y adultos.

¿Y después se puede volver a pasar?
La inmunidad que produce la varicela es para toda la vida. La vacuna de la varicela se pone actualmente a los 11 años si el niño no la ha pasado o no se ha vacunado antes (hasta hace poco había una vacuna a los 15 meses y a los tres años pero se ha retirado porque se ha visto que la inmunidad que produce esta vacuna a estas edades no es igualmente efectiva que la que produce la enfermedad de forma natural y se ha dejado sólo la vacuna para los 11 años). Hay bastante controversia sobre este tema al respecto, ya que algunos expertos defienden que se ha eliminado una vacuna que estaba disminuyendo el número de casos de esta enfermedad a estas edades y otros que ha sido una opción válida ya que esta enfermedad es banal y si se contrae se adquiere una inmunidad natural que de la otra forma no se tendría.

¿Como se trata?
El tratamiento de la varicela es sintomático, es decir, no hay nada para curar las lesiones. Se da paracetamol para la fiebre y antihistamínicos si éstas pican mucho. También se puede utilizar talco líquido o lociones de calamina para aliviar el picor.
Podemos bañar a los niños con agua tibia y jabón de avena pero los baños tienen que ser cortos porque pueden favorecer la aparición de más ampollas.

¿Es peligrosa?

En niños y personas sanas es totalmente banal pero hay que prestar especial atención a las embarazadas y bebés menores de tres meses. En las embarazadas el contagio puede provocar malformaciones en el feto en el primer trimestre de embarazo y en menores de tres meses puede ser muy peligrosa, excepto en los primeros 4 días de vida, ya que el recién nacido aún está protegido con los anticuerpos que le ha pasado su madre.
Puede haber complicaciones, claro que sí, la más frecuente la sobreinfección de las lesiones por el rascado produciendo afectación de la piel y el tejido subcutáneo.
Otra complicación, sobre todo en adultos no vacunados o que no han pasado la enfermedad de niños, es la aparición de neumonía ya que la varicela produce una bajada de defensas (inmunodepresión) que hace que pueda infectarse por otro germen.

Decir que al principio las lesiones son muy débiles y tenues y muchas veces ni se distinguen de unos simples granitos sin importancia, pero, atención porque estos granitos sin importancia en el caso de la varicela, evolucionan rápidamente tanto en número como en el cambio de forma y de la noche a la mañana el niño cambia su aspecto como si de un "ferrero rocher" se tratara, es fácil localizar la vesícula al principio y con esto claramente se identifica la enfermedad.
Muy importante recordad: " el niño con varicela no debe ir al cole ni guardería hasta que todas las lesiones se hayan transformado en costras", desde este momento, el niño ya no puede contagiar.